Los bosques y los árboles uno a uno, siempre han merecido un cuidado especial. En la mitología romana era Silvano la divinidad encargada, tanto de los que crecían salvajes como de las plantaciones arbóreas.
En la mitología asturiana el Señor del bosque es un ser mitad hombre mitad cabra conocido como el Busgosu o Musgosu: tiene cuernos, el torso cubierto de pelo y una espesa cabellera. A muchos les recordará al dios Pan.
En una región tan arbolada como Asturias, no le falta tarea al Busgosu, que bien aparece en una leyenda reprimiendo a un leñador que tala demasiados árboles, bien en otra a un cazador que caza por puro orgullo, o en una más guiando a una muchacha perdida en el bosque.
Es Busgosu es un maestro de la vida en armonía con el entorno natural, un guardián fiel a los seres del bosque y un amigo al que debemos escuchar.
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